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Esperamos que disfruten de este momento con nosotras y que experimenten el amor y la providencia del Amor Sacramentado en esta pagina.

Una Joven como todas, que se hizo exepcinal...Catalina Sordini

Y quien es ella?


Ella nace en Puerto San Estefan en el año de 1770, al siguiente día es bautizada con el nombre de Catalina.




Es una niña inquieta, alegre, vivas y atrevida, lo cual puso en peligro su vida en varias ocasiones, fue su padre quien siembra en su corazón, el gusto por la oración adorante, es el, quien en tiempos de carnaval hace exponer el Santísimo el jueves,

en reparación de todas las ofensas cometidas durante el carnaval, catalina después de haber estado en oración dice a su padre: Papa por que no es siempre jueves lardero?










De joven catalina viene a ser una muchacha desenvuelta y disponible para los trabajos de la casa.


 Ella se enamora y compromete en matrimonio con un Joven que por asuntos de negocios, parte, pero que como prenda de compromiso, le da a Catalina un cofrecito de joyas, a ella le gusto tanto el regalo, que en cuanto pudo, sin decir nada a nadie se puso las perlas y va a la Iglesia, colocándose en un lugar hermoso para ser admirada.





La ve su Padre y reprendiéndola la manda su casa, una vez en su cuarto se demora todavía un poco frente al espejo, admirando su belleza, y la prenda de amor;


en el espejo en vez de su bella imagen, ve reflejada la imagen de Jesús Crucificado que le dice: ¿Me abandonas por un amor humano?
Desde aquel evento, maduro Catalina la decisión de abrazar la vida religiosa.
Todas estas circunstancias particulares iban forjando en ella aquellas dotes humanas y espirituales que la hacen idónea para la tarea que le esperaba. Catalina pide a su Padre que la lleve al Monasterio de las Terciarias Franciscanas en Ischia de Castro.

 Entro literalmente con un salto dejando a su padre que la había acompañado con la secreta esperanza que fuera solo una visita.



Seis meses después, vistió el hábito tomando el nombre de sor Ma. Magdalena de la Encarnación. el añol789, un jueves de carnaval es decir, lardero sor Ma. Magdalena atendía el refectorio. Pasó la M. Superiora y le pregunto si ya había tomado el desayuno, a su respuesta negativa, la exhortó a tomar pan, en cuanto ella llevo el pan a la boca se transporto en éxtasis,


 y eh aquí que la pared se rasgo y se tiño de azul,




 figuras misteriosas con habito blanco y rojo cantaban las alabanzas del Divino Sacramento y la voz de Jesús que le dice: Quiero sobre la tierra un coro de ángeles que me alaben y atraigan a muchos a mi Divino Corazón que en este Sacramento late de amor.


Sor Ma. Magdalena recibe esta misión como una semilla que a su tiempo dará fruto, y espera para que Dios revelase el tiempo y momento para realizar su proyecto.

Mientras tanto Sor Ma. Magdalena lleva una vida de entrega generosa. Cuando en el año de 1802 se le nombro inesperadamente superiora, sucedieron hechos milagrosos, en particular el 16 de junio del día de Corpus,


 no había en todo Ischia un saco de harina y las hermanas panaderas tenían solo un puñado de Harina, la Beata M. Ma. Magdalena bendiciendo la harina ordeno vaciarla en la acostumbrada cantidad de agua.


Bajo sus ojos, mientras mezclaban, increíblemente la harina se cuaja y pueden amasar el pan que duro milagrosamente para toda la población hasta el 29 de junio.


 Fue el 31 mayo de 1807 que la Madre parte para Roma junto con dos religiosas y unas muchacha para hacer fundación. La nueva Comunidad, constituyo desde sus inicios un centro de atracción.
Nuestra Bta. Madre enseña a sus hijas a ser todas de Dios a sus hijas a ser todas de Dios para amar a los hermanos en la libertad, nos enseña a mirar la vida y las situaciones desde el punto de vista del Misericordioso Jesús que expuesto adoran. 

Ellas han de ser signo vivo de aquella presencia Eucarística que a menudo a los hombres les cuesta trabajo reconocer y entender.
Nuestra Bta. Madre murió el 29 de noviembre de 1824, al caer de las hojas, cuando se rezaba el rosario. 



Su deseo mas ardiente, era dar a conocer el amor de Jesús Sacramentado  y que fuera amado, y que en todos los rincones de la tierra se estableciera un trono eucarístico




para que fuese adorado, es por ello que sus hijas cumplen su deseo ardiente y se extienden por gran parte del mundo,


 dándolo así a conocer en este Sacramento y participando de esta manera en el ansia misionera de la Iglesia